Hoy os traemos una interesante entrevista que nuestra socia Elena Crespo Lorenzo, responsable del departamento de Derecho de Familia de Bressers Law, tuvo el placer de realizar como colaboradora de Diario de Mediación al magistrado Pascual Ortuño, pionero en la aplicación de la coordinación de parentalidad en España. Elena participó activamente en la organización y desarrollo del I Congreso Internacional de Coordinación de Parentalidad en Barcelona, celebrado los pasados 23 y 24 de noviembre y organizado por Ancopa, en calidad de abogada especialista en coordinación parental.
Si quieres saber más sobre qué es la coordinación parental en caso de divorcios conflictivos con presencia de menores, te facilitamos este post explicativo.
Durante las diferentes intervenciones de Pascual, magistrado de la Audiencia Provincial de Barcelona y pionero de la coordinación parental en nuestro país, aseguró que su papel ha sido limitarse a observar lo que ocurría en otros países y adaptarlo al caso de España. Después de ver en primera persona distintos casos de alta conflictividad, aseguró que genera “frustración” no poder solucionar los problemas de estas familias.
Así, comentó que los medios legales de que disponen los jueces no son suficientes ante ciertas preocupaciones difíciles de superar, y observó que en otros países se actuaba más en equipo, de forma que los jueces contaban con la colaboración con otros profesionales. Se daban, en definitiva, métodos como el de la coordinación de parentalidad, donde un experto puede hablar con unos y otros y usar técnicas para intentar solventar la situación.
En cuanto a qué perfil profesional debe cumplir este rol, comentó que lo que debe primar es la experiencia con familias en crisis, y que puede tratarse de pediatras, psicólogos, psiquiatras, educadores, abogados, trabajadores sociales… La gama de estudios universitarios es amplia, pero se debe tener una experiencia y una formación específica, al ser un área muy complicada, llena de situaciones de bloqueo.
Hay que tener en cuenta, comentó, que en España hay aproximadamente unos 2.600 o 2.700 casos susceptibles de intervención de coordinación parental y que, por tanto, merece la pena invertir en coordinación de parentalidad, dado que ello afecta a núcleos amplios, con 8 o 10 personas implicadas en cada uno de estos casos: niños, padres, abuelos… "Si un edificio está ardiendo, ¿merece la pena salvar a un niño?” Y la respuesta es, por supuesto, afirmativa. "Nuestra sociedad está muy judicializada y la sociedad debe dotarse de mecanismos de negociación propios".
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